Una mirada al Islam

Documento de trabajo. Triángulo Pitágoras II. Logia Acacia Nº1. Taller de didáctica de docencia Masónica. Jornada de verano 2006

Introducción

El mundo Cristiano indica que el tiempo se divide a partir del nacimiento de Cristo, (cronológicamente el penúltimo de los enviados), para el Islam el tiempo se divide a partir de la Hégira (migración) del profeta Muhammad a Medina (al – Madina” la ciudad del profeta”), este hecho ocurre en el 622 dC. Es importante señalar que Muhammad fue enviado a los árabes primero y, luego a toda la Humanidad, por ello el Islam es una religión universal. Después de él, no será enviado ningún profeta y la legislación promulgada en el Corán será válida hasta el día de la Resurrección. Si nosotros miramos a los árabes, habitantes de la península del mismo nombre, (desde la política como tecnología del poder) antes del siglo VII, tenemos a un conjunto de tribus sin unidad y sin poder aparente. Para los Imperios del minuto (Imperio Bizantino y la Persia Sasánida), la península presenta problemas coloniales, no gravita en las decisiones, es decir, eran objeto y no sujetos de la historia. Hoy en el siglo XXI dC, el Islam en general y una serie de regiones que poseen una gota de petróleo en sus territorios, si intentan ser sujetos de la historia para los actuales imperios. Los árabes (desde la política como una utopía que nos es posible alcanzar) a partir de la Hégira, ellos intentan construir el reino del único y verdadero Dios sobre la tierra. (Corán, Sura I). Su tarea no ha terminado, ella continua y es algo que deben realizar dado que es un mandato. (Corán, Sura IX/ 5). Por tanto el Corán se coloca en la línea de continuidad de los Evangelios(1) y de la Tora(2), dado que la religión ha sido siempre la misma. Los dogmas de los Evangelios y de la Tora deberán ser los mismos. Dios, dicen los musulmanes, es el autor de todo el Corán, como lo es también del Evangelio y de la Tora. Las semejanzas, parentescos y paralelismos se explican por un origen común, el origen divino.

La vida del profeta Muhammad

Nació hacia el 570 o el 580 DC, en La Meca, centro comercial que vivía de los beneficios adquiridos mediante el tráfico internacional a larga distancia y religioso de Hejaz. Pertenecía a la tribu Quravsh, y más especialmente al clan de Hashim, trabajo en el oficio de conductor de caravanas, (situación que le permitió conocer religiones no árabes, con otras visiones, diferentes métodos de meditación y nuevas experiencias místicas), para una viuda Khadiva, que acabó casándose con él.

Hacia el 610 DC, (con 30 o 40 años de edad), tiene su primera revelación, en ellas se le aparece el arcángel Gabriel, mediante las cuales Dios (Alá), le revela textos que, trasmisor pasivo, recita a sus allegados. El conjunto de tales textos constituyen el llamado Corán (Qur´an, “recitación de la palabra de Dios”, “Ésta es la Escritura, exenta de dudas, como dirección para los temerosos de Dios ”(Corán II/2))

Hacia el 613 DC, empieza una prédica pública, (es un nadhir, alguien que divinamente inspirado, pone en guardia a sus hermanos humanos), en donde, aún no se encuentra bien trazado el camino, por los llamados “versículos satánicos” (inspirados por el diablo, Iblis), existen resabios politeístas.

Hacia el 615 DC, existe un trazado monoteísta claro y preciso (No hay más Dios que Dios y Muhammad su profeta).

En el 622 dC, emigra a Medina, (La hégira, marca el comienzo de la era musulmana), con un puñado de sus partidarios, dado que la situación en La Meca se torna insostenible. En Medina, donde existe una importante población judía3 y cristiana4, instaura un ayuno calcado de su propio ayuno expiatorio y prescribe que para orar los fieles deben volver hacia Jerusalén.

En Medina, el profeta, organiza su comunidad y le da un sello completamente árabe, marca distancia de los judíos y los cristianos, (Corán II/111; Corán II/113)), pero sin olvidar un elemento que es común al judaísmo, al cristianismo y el Islam, es que el hombre es una criatura. El hombre, como todos los seres, se caracteriza por su dependencia absoluta con relación a Dios, su creador y su dueño, infinitamente bueno, sabio, todopoderoso, a quien se le debe todo y cuya mejor definición es el silencio(5). Por ello, es que Dios le revela las reglas de vida social a su Rasul, (Rasul “Mensajero de Dios”), es:

  • El sello de los profetas (Khatam al-ambiya (Corán XXXIII/40)).
  • Ordena que para orar deben volverse hacia La Meca y, se harán peregrinaciones a La Meca.
  • Además, el ayuno quedará prescrito para el mes de ramadan.
  • Se da forma a la umma (comunidad de creyentes, todos iguales ante los ojos de Dios y por tanto hermanos e hijos de un mismo padre, en esa concepción se defiende a los pobres y predica una conducta humana con respecto a los esclavos), la cual es una nueva comunidad social, política y económica que trasciende los grupos étnicos (“Sois la mejor comunidad humana que jamás se haya suscitado,…,”(Corán III/110)).
  • En el ámbito de las relaciones familiares hace esfuerzos para asegurar la libertad de elección entre las mujeres y evitar los abusos del poder masculino. (“Casaos, pues, con aquellas mujeres que os sean gratas, en número de dos, de tres, de cuatro, (pero) si teméis no ser equitativo (tomad) una sola, o bien concubinas”(Corán IV/3)).
  • Reglamento el divorcio y el concubinato (Corán XXXIII/37).
  • La guerra contra los enemigos de Dios, se presenta como un acto santo, ella, la guerra santa, es un trueque comercial. El musulmán renuncia a su vida, la ofrece a Dios, que le prometa a cambio el paraíso.(“Dios ha comprado a los creyentes sus personas y su hacienda, ofreciéndoles, a cambio, el Jardín. Combaten por Dios: matan o le matan (Corán IX/111; Corán LXI/10-11”)
  • Existe una desaprobación coránica del wa´d o asesinato de las hijas recién nacidas

En el 630, regresa en forma triunfal a La Meca y muere en el 632. (Su cuerpo místico, sube a los cielos en el “domo de la roca” en Jerusalén). El Corán no contenía ninguna norma o indicación para la sucesión de Muhammad y sus compañeros tuvieron que improvisarla. Abu Bakú, compañero de los primeros tiempos y padre de Aisa, la esposa más joven y predilecta de Mahoma, fue nombrado Califa, (Califa o Jalifa es el titulo del jefe político, militar y religioso). Pero este hecho marca el inicio de una serie de disputas, guerras internas, rebeliones, asesinatos políticos y nuevos profetas, de toda clase estilos y especies. Antes, los oráculos coránicos proclamados por Muhammad habían sido grabados en la memoria. (los memoriones son hombres que en una cultura oral, pueden conocer, saben repetir, pueden recitar con giros teatrales e interpretar centenares de versos, para ellos es una actividad importante y una forma de vida(6)). Abu Bakú, el primer Jalifa, aconsejado por Umar, para mejorar y corregir interpretaciones diferentes, entregadas por diversos memoriones se ordena la elaboración de un texto oficial (634 dC). En los cincuenta años posteriores a la partida física del profeta, sus seguidores llevarán el Islam hasta Samarcanda en las fronteras de China, golpearán la puertas de Viena en más de una oportunidad y, a la llanura de Poitiers en Francia, llegara su caballería. Esta situación implica nuevos problemas y complicaciones, no todos saben y no conocen la grafía del texto coránico, (en esa época los puntos diacríticos no se señalaban aún, algunos signos podían representar dos consonantes diferentes, uno de ellos podía significar hasta cinco letras diferentes y en relación a las vocales, las breves e incluso las largas no se indicaban). Para superar esta situación se establece un texto oficial y se envío un ejemplar de éste a las principales ciudades del imperio árabe - musulmán. Ha de correr mucha agua bajo los puentes, para conocer un texto más o menos definitivo y ocurre en el siglo IX dC, ello no implica que existan un sin número de lecturas en circulación, las variantes de estas lecturas no difieren en elementos centrales o fundamentales.

Una reflexión

Se cuenta, (argumento tomado de articulo titulado el “Simbolismo filosófico” de la revista Diógenes. Ed. Sudamericana. Junio de 1955 ), que el profeta Mahoma (La paz de Dios sea con él, y con todos los creyentes), un día, interrogo a tres esclavos convertidos al Islam: “¿Dónde está Dios?”. Uno de ellos, muy rápidamente responde: “Dios está en el cielo”. Después de un instante otro de los interrogados, responde: “Dios está en todas partes”. Pasan los minutos y, el último, en un tono muy lento y como si temiera algo muy terrible, dice: “Dios no está en ninguna parte, está en sí”. Cierta o no, la historia relatada, referida al profeta y los esclavos conversos, nos lleva a revisar la Epístola a los Hebreos, en lo relativo a la Fe y, nos dice, respecto de la fe que es una demostración de las cosas que no se ven. A modo de colofón, (lo que se coloca al final de un texto), podemos formular dos preguntas a los presentes, una de ellas en voz baja:

  • “¿Cuantos esclavos tenemos entre los lectores de estas línea?”.
  • La segunda pregunta en voz alta: “¿Dónde está el G:. A:. D:. T:. L:. M:. ?” .

Mí mejor respuesta para cada una de las preguntas, es el silencio “¿Cuál es la del lector de estas líneas?”.

#Algunas interpretaciones respecto a la gran expansión Es importante resaltar que ninguna situación histórica es susceptible de una solución única y menos absoluta. Tradicionalmente, desde una teología fundamentalista, podemos considerar la conquista árabe - musulmán como un acontecimiento puramente religioso guiado y conducido por Dios (Los conversos de la nueva religión, como una forma de manifestar su fe, quieren someter a los otros pueblos que profesan religiones diferentes).

Otras ideas establecen que la irrupción de los árabes mas allá de sus fronteras, bandas armadas en acción de conquista - saqueo, no es algo nuevo en su vida histórica como pueblo. Es la suma de necesidades económicas; su territorio es lugar obligado de transito y comercio de mercaderías desde y hacia el oriente medio – mediterráneo – Europa central; poblacionales, en el sentido que poseen aumentos explosivos de natalidad y por ende de una población excedente que no pueden asimilar con el grado de desarrollo de recursos agro ganaderos, la que los lleva a esas incursiones periódicas hacia sus vecinos. Lo diferente de todas las anteriores, es que tienen una bandera religiosa que los guía y les da un norte(7), dicha bandera político-religiosa puede tener todo el carácter de un Estado. Es el nuevo Estado Árabe Musulman, que logra dar coherencia y solución a una situación compleja en lo étnico y contradictorio en lo económico con zonas de desarrollo desigual y combinado, al interior de la península.

A todo lo anterior, nos podemos consultar qué factores (sociales, políticos, económicos y religioso – culturales, geo político militar) y necesidades no satisfechas, inciden en que movimientos religiosos normales en la vida de toda sociedad humana triunfen y, otros se vean condenados al fracaso.

Una respuesta clara precisa y concreta y además en palabras inteligentes, que nos diga la esencia del cómo y porqué Muhammad tiene un éxito prodigioso, pero no así en la misma dimensión un Lutero y/o Calvino. La desconozco, solo puedo enumera algunos factores para la discusión, dado que ningún acontecimiento histórico es fatal o bien aventurado en sí. (Recordemos que los conceptos se llenan de significado según la propia experiencia o formación, pero por sobre todo, depende de los marcos ideológicos en los cuales nos estemos moviendo, y en cuya definición estemos todos de acuerdo):

  • El Islam es esencialmente una tentativa de reforma social que les suministra una ideología nacional propia, que se justifica por la fe común y la idea del juicio personal del individuo, la superación en lo económico y político del horizonte tribal:
  • Los Hermanos musulmanes del Cercano Oriente, consideran que el Islam es un sistema social perfecto, dictado por Dios, por tanto una tercera vía entre el capitalismo y el comunismo, y por ende un modelo para toda la humanidad.
  • Los ricos son la clase pecadora que no podrá afrontar con éxito el Juicio final, a menos que purifique su alma mediante el pago del impuesto a los pobres, el zakat (“purificación”; “que creen en lo oculto, hacen la azala y dan limosna de lo que les hemos proveído (Corán II/3) ).


  1. Los libros del Nuevo Testamento narran la vida y obra de Jesús por ello se llaman Evangelios. Son 27 libros, la mayoría de ellos fue escrito en Hebreo o en Arameo. ↩︎

  2. La Tora hace referencia directa a los cinco libros de Moisés, existen aproximaciones, pero, lo fundamental es eso. ↩︎

  3. Hay toda una literatura sobre el tema del origen esencialmente judío del Islam. ↩︎

  4. De forma similar se atribuyen un origen cristiano del Islam, entre otras obras: “Les origines de l´Islam et le Christianisme”. ;. Roch, París, 1955. ↩︎

  5. Si intentamos dar una definición de Dios, nos encontramos frente a una realidad lo estamos cosificando y al hacerlo pierde el sentido de infinito-grandeza. ↩︎

  6. Homero es quizás con sus obras La Iliada y La Odisea, el más importante de los memoriones de la historia de la literatura. ↩︎

  7. Tenemos un objetivo claramente definido en el libro sagrado: Llevar la única fe verdadera a todos los infieles. Y un conjunto de fines que desarrollar: Ir hacia todos los lugares del mundo en donde pueda caminar con mi cabalgadura. ↩︎